En ciudades como Temuco más del 95% de las emisiones de Material Particulado (MP) 2,5 corresponde a hogares que utilizan leña para calefaccionarse y cocinar. El problema es que a consecuencia del frío clima invernal y la baja eficiencia en las construcciones, los consumos de leña en las viviendas y edificios comerciales son muy altos debido a la necesidad de calefaccionar construcciones donde el calor se escapa constantemente por techumbres, muros, ventanas y puertas.
Esto genera graves problemas de contaminación ambiental, especialmente del material particular más fino, que produce los mayores problemas en la salud debido a su pequeño tamaño.
“La mejora térmica de las viviendas ha demostrado tener un alto potencial de reducir la contaminación ambiental, ya que disminuye la demanda de energía de las viviendas, solucionando de esta forma el problema de fondo”, dijo Alejandra Schueftan, Gerente de Proyectos GVC.
La especialista agregó que “los Planes de Descontaminación Ambiental consideran diversas mejoras en la normativa para viviendas nuevas, aumentando los requerimientos de aislación para los distintos componentes de la envolvente (piso, muros, techumbre) e incorporando otros aspectos técnicos como condensación, ventilación e infiltraciones. Este último punto es crucial para lograr viviendas con un alto desempeño energético”.